Una caída que fue tropezón
Foto: La Docta Futbol Club | Corresponsalia Salta
La "T" cayó en Salta ante "La Juve". El gol de Triverio vale la pena verlo, el de Badaracco fue un error del mediocampo donde "Cacho" deberá corregir.
Juventud Antoniana por fin encontró algo de alivio con el triunfo que consiguió sobre Talleres por 2 a 0. El conjunto de Sialle cosechó su primera caída en el torneo donde rompió un récord de 330 minutos sin recibir goles en contra (no le marcaban desde el partido ante Sp. Belgrano en la fecha 2).
Es la primera victoria que logra el santo, luego de cuatro empates consecutivos desde que se puso en marcha el Argentino A. Este resultado sirvió para descomprimir la tensa semana que se vivió la institución de Lerma y San Luis por la negativa de los dirigentes de entregar entradas de favor a los hinchas "matadores" por sancion a los inadaptados que provocaron los hechos de violencia en el clásico ante el "Cuervo".
El problema planteado, en alguna medida, había dejado de lado el interés por este compromiso que el santo superó con creces ayer en el Gigante del Norte frente a los cordobeses; desplegando un juego inteligente y redondeando una victoria sin discusiones.
Ganó bien Juventud. De eso no caben dudas, porque elaboró un planteo que fue creciendo a medida que encontró los espacios, para que tanto Enrique Triverio, en una primera instancia, y luego Cristian Badaracco facturen dos excelentes goles, por las concepciones de las jugadas previas a las definiciones.
Para tomar confianza y llegar hasta la valla visitante, el conjunto antoniano primero tuvo que ordenarse defensivamente, porque, ni bien iniciado el juego, la "T" sorprendió con algunas incursiones del grandote Gonzalo Klusener, a quien el árbitro Argañaraz le anuló un gol por una dudosa posición adelantada, ante una fallida salida del arquero Esteban Dei Rossi.
Cristian Badaracco comenzaba a avisar en una avance profundo con un remate que se fue lejos del arco cordobés. Y en otra incursión en la valla defendida por Diego Aguiar, Enrique Triverio recibió un pase del mismo Badaracco y anotó el primer gol.
Con ese tanto, Juventud ganó en tranquilidad. Carlos Keosseian agigantó su producción y en defensa Elián Parrino se afianzó cada vez más como primer marcador central.
Con un Talleres desconocido, los dirigidos por Delfino fueron asegurando los tres puntos, de tal forma que Badaracco, para recibir su premio, se encargó de asegurar el 2 a 0, tras un error de Bottino y que Juan Pablo Rial realizó una buena jugada con un pase habilitado para concretar el gol final.
Ya casi al final, Ivo Hong tuvo la posibilidad de marcar el descuento por medio de un cabezazo, pero Herrera se la sacó de la linea y el "Matador" se quedó con las ganas de gritar.